Tres hombres que presuntamente robaron aguacates de una huerta iban a ser linchados por pobladores del municipio de Totolapan, la tarde del viernes.
Los habitantes quemaron el automotor.
La Comisión Estatal de Seguridad (CES) aseguró que el dueño de la huerta observó que unos individuos subían sus frutos a la cajuela de un vehículo Nissan, GS de color color blanco.
Así que con ayuda de los vecinos sometieron a los delincuentes y fueron llevados a la explanada de la cabecera municipal.
Ahí la gente quemó el automotor, pero los policías lograron convencerlos de que no golpearan a los supuestos responsables.
La familia de los culpables llegó a un acuerdo con el agraviado para pagar los aguacates, y así evitar que levantaran cargos en su contra.