Carlos Iván Arenas Angeles, magistrado del Tribunal Superior de Justicia (TSJ), aseguró que durante los últimos tres años el Poder Judicial estatal atraviesa una severa crisis de corrupción y nepotismo.
Aseguró que en el tema de corrupción son muchos los casos en los que la impunidad genera corrupción, luego de que a muchos ex funcionarios de la administración pasada del gobierno; les han judicializado carpetas y han resultado absueltos por deficiencias en su integración o formulación de imputación o peor aún con la complicidad de funcionarios judiciales.
«Es un secreto a voces que al interior del Poder Judicial hay una red de malos funcionarios (que son los menos) que responden a intereses ajenos a la justicia; y no se está haciendo nada por atacar este cáncer», afirmó.
No existe el más mínimo interés de poner orden en las adscripciones y ya se institucionalizó el pase automático, apuntó.
Es decir que continuamos con la designación de jueces y secretarios y actuarios sin previo examen o concurso de oposición, incumpliendo con lo mandatado en la Constitución, según dijo.
Al respecto ya son muchas ejecutorias de amparo que dan constancia de lo que se asevera. Prueba de ello son las recientes ejecutorias de amparo en revisión que dan cuenta de los abusos y excesos cometidos por la actual administración del Tribunal Superior de Justicia.
En los últimos años las adscripciones no están reguladas, ni hay criterios; no existe el interés de usar dichos criterios con una forma programática de una política pública para mejorar el Poder Judicial ni para servir como instrumento para abatir el nepotismo y la corrupción.
«No se está combatiendo con energía al nepotismo y la corrupción y por el contrario ya se institucionalizó. No hay quien impulse a jueces de calidad», subrayó.
El combate efectivo a la corrupción requiere necesariamente de una voluntad política para implementar una cultura de la honestidad judicial, a través de medidas aplicables a la profesionalización, selección y nombramiento, adscripción, ascenso evaluación y disciplina en el marco de la carrera judicial, que hoy es nula.