CUERNAVACA, MOR.- El presidente nacional del PRI, Alejandro Moreno Cárdenas, designó a Josué Cirino Valdés Huezo presidente provisional del tricolor en el estado de Morelos, tras la separación del cargo del ex diputado local, Alberto Martínez González, quien fue despojado de sus derechos políticos por la comisión nacional de Justicia Partidaria.
En las oficinas del comité nacional, Moreno Cárdenas entregó la encomienda a Valdés Huezo, quien deberá convocar en un tiempo a elecciones internas para renovar la direccion partidista, misma que le fue arrebatada mediante un proceso jurídico a Martínez González, contra quien pesan varios procesos partidistas, entre ellos, por haber mandado a golpear a quien ahora lo suple.
En tanto, simpatizantes del presidente depuesto, mantiene tomadas las instalaciones partidistas, y han advertido que no permitirán que el ahora presidente provisional despache en dicha sede porque consideran una ilegalidad la determinación del CEN.
La semana pasada Valdés Huezo fue retenido en las escaleras del comité estatal por varios hombres, quienes lo agredieron físicamente y luego lo alcanzaron en la oficina de la secretaría particular de presidencia, donde siguieron agrediendo. El hecho quedó grabado en un video que rápidamente se difundió en internet.
La agresión física se da en el marco del proceso de renovación de los comités municipales priistas, los cuales pretendía manejar a su parecer, el ahora ex presidente, sin la participación del delegado nacional.
La separación del cargo de Martínez González causó estado este medio día, luego de que miembros del comité nacional le comunicado, vía estrados, la suspensión de sus derechos partidistas el cual -a su vez- deriva de un procedimiento iniciado por el propio delegado nacional.
Sin embargo, información oficial obtenida, indica que sobre el ex legislador pende la posibilidad de una expulsión y el inicio de un proceso penal debido a las altas traiciones cometidas contra el PRI en temporada electoral y el desvío de los recursos internos del partido a razón de más de 700 mil pesos mensuales.
Cabe destacar que Martínez González ya había sido separado de la dirigencia partidista en mayo de 2018, luego de que en, en estado de ebriedad, protagonizó un episodio de tránsito que fue vidoegrabado por ciudadanos, que a su vez, lo enviaron a redes sociales. Ello derivó en un elemento de desprestigio para el PRI y sus diversos candidatos que en ese momento se encontraban en campaña político-electoral.