CUERNAVACA, MOR.- En los últimos años, el Poder Judicial de Morelos optó por omitir los exámenes de aptitud y conocimiento en el nombramiento de jueces, por lo que ahora es evidente la incapacidad, laineptitud y el presunto favoritismo a criminales.
El magistrado del Poder Judicial estatal, Carlos Iván Arenas Ángeles, afirmó que es lógico que en este momento sean las propias autoridades estatales las que cuestiinen la capacidad e integridad de los juzgadores.
Luego de que el Poder Ejecutivo, a través del gobernador, Cuauhtémoc Blanco y el secretario de Gobierno, Pablo Ojeda Cárdenas, denunciaron que mas de medio centenar de secuestradores (64) han sido liberados por jueces estatales en los últimos meses, el magistrado aseguró que mientras estas dudas y prácticas permenezcan, «no habrá paz en la entidad».
Este martes, Ojeda Cárdenas informó que debido a lo qie denuncian, se iniciaron denuncias penales contra 11 jueces estatales.
Además de Poder Ejecitivo, esta semana la Fiscalia Anticorrupción que encabeza, Juan Salazar Núñez, dio a conocer que abrió carpetas de investigación también contra jueces que han sido evidentemente parciales al evitar, anular o retardar procedimientos contra ex servidores públicos, ex diputados locales y ex presidentes municipales.
«Al poder judicial estatal le urge un cambio de rumbo para recuperar la credibilidad y la confianza de la gente… jueces tan seriamente cuestionandos en los últimos cuatro años. Estamos llamados a revisar nuestros procedimientos de designación de jueces, pues en los últimos años se hicieron designaciones sin exámenes de concurso de oposición», afirmó.
Informó que ante esta realidad, urge que los jueces garanticen autonomía e independencia, «en donde su único jefe sea la constitución y la ley y su conciencia».
Indicó también que no sólo los jueces han sido designados eb los últimos años sin exámenes de oposición, sino también el Poder Judicial estatal dejó de evaluarlos y de aplicarles el código de ética», aseguró.
“A la sociedad de Morelos le urge jueces no sólo autónomos e independientes; sino valientes pero con valores. En síntesis no sólo con conocimientos del derecho sino además: “buenos seres humanos», porque la tarea de juzgar a nuestros semejantes no es una tarea fácil.