Autoridades del Aeropuerto “Mariano Matamoros” aseguraron que el jet de pasajeros sustraído por dos pilotos no autorizados, el pasado 22 de septiembre, iba vacío, es decir, no llevaba las drogas y las armas que se encontraron después de que se estrelló en una carretera clandestina en Guatemala, al siguiente día de que despegó del inmueble morelense.
En entrevista exclusiva para APD, el director jurídico del aeropuerto, Francisco Guillén Valdez, reveló detalles del día en que dos pilotos disfrazados de mecánicos, se llevaron el Hawker 700 con matrícula XB-PYZ y que despegó sin tener plan de vuelo y sin autorización de la Torre de Control y de la comandancia.
“La avioneta estuvo resguardada aquí en el aeropuerto más de un mes; las aeronaves cuando llegan son revisadas, por SEDENA, la aeronave no salió con ningún tipo (de droga o arma) sí debe haber inspección, obviamente por la forma en que salió no la hubo, pero las posibilidades de que esa nave, llevara algo en el avión, además de las personas que la piloteaban, es nula, porque el avión estuvo resguardado y fue revisado”, aseveró el funcionario.
En tanto, al reiterar que del Mariano Matamoros la aeronave despegó sin el cargamento ilegal, dijo serán las autoridades de Guatemala quienes indaguen al respecto, si la droga se obtuvo en Venezuela, donde aterrizó cuando salió de Cuernavaca o viceversa.
Si bien, están a la espera de las investigaciones de la Fiscalía General de la República (FGR), aseguraron que las autoridades de este inmueble coadyuvan en todo momento para que estas sigan su curso, pero una vez que se tengan los resultados de las mismas, entonces se podrá saber si el error estuvo entre el personal del aeropuerto o en los destacamentos de la Guardia Nacional, la Secretaría de la Defensa Nacional o en la autoridad local.
No obstante, mencionó que los dos pilotos sin autorización para volar y que probablemente fallecieron en el accidente en Guatemala, ya habían entrado en otras ocasiones al inmueble, por lo que ya conocen de quién se trata, por lo que no descartan que entraron a recuperar la aeronave, mientras una manifestación atípica en el lugar, era atendida.
Al cuestionarlo sobre la responsabilidad de la empresa que mantuvo el jet en su hangar desde el 10 de agosto, refirió que la FGR averigua las acciones de la empresa International Corporate & Cargo Services, S.A. De C.V. Así como las del propio aeropuerto y su administración, ello para verificar en donde estuvo la falla que derivó en que dicha nave despegara con un sin fin de irregularidades.
Aún así, descartó que al interior del recinto se requiera reforzar la seguridad tras el incidente de la aeronave, pues mencionó que para el nivel de actividades del recinto, es suficiente la seguridad privada y un austero destacamento de la Guardia Nacional que ahí se encuentra.
“No estimamos en este momento que tengamos falta de seguridad, yo creo que estamos completos, el edificio terminal está trabajando con un solo acceso, por el tema de pandemia. En las zonas restringidas obviamente los protocolos son más estrictos”, acotó.
Empero no descartó que hechos como el mencionado, se vuelvan a suceder, pues no solo ha ocurrido en aeropuertos como el de Cuernavaca, si no también en otros “se hace todas las acciones posibles, ninguna instalación aeronáutica está exenta de que ocurran este tipo de situaciones adversas, comprometerse al 100 por ciento de que no vuelva a pasar, si me gustaría hacerla, pero realmente no está en manos de la administración de este, porque por parte del aeropuerto se cumplieron todos los protocolos”, reiteró.
Por tanto, por el momento no han decidido si “rodarán cabezas” por este “hecho aislado”o si habrá personal tanto del aeropuerto o de la empresa investigado porque haya permitido que sustrajeran el avión o esté involucrado con los pilotos sin permiso. En caso de que sea así, dijo, vendrán las sanciones correspondientes.
“Por reportes que se tienen (…) son dos personas que en al menos dos ocasiones anteriores ya habían venido a ver la aeronave, pero te lo digo porque lo sé por reportes que hemos recibido de las áreas respectivas”, detalló.
En tanto, a la procedencia del avión, las irregularidades que tenía y su probable dueño, hasta el momento no se tienen registros de dónde llegó el avión Hawker el pasado 10 de agosto, es decir, si fue proveniente del aeropuerto de Cozumel o de Tapachula, que son los únicos autorizados para recibir aeronaves provenientes de Sudamérica.
“Nosotros tenemos registros de los vuelos que llegan, pero no indagamos en los antecedentes”, señaló al cuestionarlo respecto a que si desconocían si esta aeronave llegó directamente al Mariano Matamoros de otro país o antes pisó la instalación del aeropuerto de Tapachula o el de Cozumel.
De igual modo, dijo que hasta ahora, no hay una denuncia por “robo” del avión, si no por la forma en que fue sustraído y eso lo investiga ya la FGR.
Con base en testimonios anónimos obtenidos por APD, es que al interior del aeropuerto existe una grave falta de comunicación, no comparten información entre sí y cada quien la maneja a su modo, el pleito es entre la directiva del inmueble y la comandancia, lo que derivó en que “prácticamente el avión se lo llevaron en sus narices y nadie lo pudo detener”.
Y es que, por el lado de la comandancia, existe cierto enojo, porque el recinto ha sido utilizado únicamente para hacer grabaciones de películas, comerciales y hasta novelas, prueba de ello es que el Boeing 727 abandonado en el recinto desde 2008 ha sido utilizado para ello, por lo que el titular de esta área ha intentado cambiar este aspecto del lugar, hecho que ha provocado fricción entre las áreas, revelaron las fuentes consultadas por el Financiero.
Al respecto, Francisco Guillén mencionó que sí, han permitido que se graben algunas imágenes de la aeronave que no ha sido reclamada, pero únicamente, dijo, grabaciones por fuera y de lejos.
Y es que actualmente, lo que mantiene al aeropuerto con una constante actividad, son las siete escuelas de aviación, la empresa FBO y GeoAir que se dedica a la fotografía aérea, así como también las filmaciones, porque los vuelos comerciales ya no llegan ahí p, debido a que las aerolíneas que operaron durante la administración de Graco Ramírez, dejaron de hacerlo a raíz del socavón en el Paso Exprés de Cuernavaca, pues el trayecto era muy tardado.