Obispo de la Diócesis de Cuernavaca, Ramón Castro Castro, reiteró qué el Obispo de Chilpancingo Salvador Rangel, continúa “débil” para declarar sobre lo sucedido.
“No está bien, está todavía bajo los efectos de las tremendas drogas que le han dado, no puede hablar bien, no he hablado con él, no articula bien las palabras” afirmó Castro Castro.
El obispo de Cuernavaca, expresó esté martes que “tienen” qué confiar en el dictamen pericial que realizó la Fiscalía General de Morelos, “nosotros de alguna manera tenemos que tener fe en las instituciones” afirmó Castro.
Tras el deterioro mental que presuntamente prevalece en
Rangel Mendoza, el obispo de Cuernavaca comentó que se desconoce si el en algún momento vaya a declarar, pero también afirmó que él tiene el derecho de no declarar sobre lo sucedido por ser víctima.
“Lo único que puedo decir, es que el Comisionado de Morelos, no debió declarar sobre algo que no le competía” afirmó Castro Castro, después de que el Comisionado de Seguridad de Morelos, José Antonio Guarneros, opinara sobre la situación del Obispo de Chilpancingo.
El obispo de Chilapa del estado de Guerrero, Salvador Rangel Mendoza, estuvo por última vez en contacto con su familia el 27 de abril en el municipio de Jiutepec en el estado de Morelos, donde posteriormente el 1 de Mayo, fue reportado como desparecido a través de las redes sociales de la Diócesis de Guerrero, horas más tarde fue localizado en Hospital General de Cuernavaca en calidad de desconocido.
El mismo lunes que fue localizado, fue trasladado a un hospital privado por la noche, tras la severa condición en la que se encontraba por la falta de sus medicinas para la presión, como por el marca pasos que tiene en el corazón.
Tras nueve días de su localización, el obispo Rangel Mendoza, no ha declarado y se encuentra en compañía y al cuidado de toda su familia.